La Menorá es uno de los símbolos judíos más antiguos. Fue encontrada grabada en rocas, representada en mosaicos, monedas y sarcófagos de piedra. La imagen de la Menorá siendo saqueada del Segundo Templo es famosa por su representación en el Arco de Tito, a pesar de que algunos eruditos cuestionan su fidelidad. En los jardines de la Knéset (Parlamento israelí), hay una gran escultura de bronce de una menorá realizada por Benno Elkan, que muestra los eventos principales en la historia judía.
La forma de la escultura de la menorá, un tallo central con ramas que se extienden a ambos lados, evoca claramente la imagen de una planta. En efecto, la descripción de la menorá en la Torá es en términos botánicos: tallos, ramas, flores, cálices, copas en forma de flor de almendro. Esto ha llevado a algunos a sugerir que la fragante planta Moriá de Israel (Salvia palaestinae – una clase de salvia) pudo haber sido el modelo botánico en que se basó la menorá. La menorá es una especie de árbol estilizado, tal vez el origen del símbolo del árbol de la vida.
Los Cohaním (sacerdotes) encendían la menorá en el santuario cada anochecer y lo limpiaban cada mañana, cambiando las mechas y colocando nuevo aceite de oliva en las copas. La forma fue, según se cree generalmente, dada a Moisés por Dios, como se relata en el Éxodo 25:31-37:
"Harás un candelabro de oro puro; labrado a martillo se hará el candelero; su pie, su caña, sus copas en forma de flores, serán de lo mismo. Y saldrán seis ramas de sus lados; tres brazos del candelero a un lado, y tres brazos al otro lado. Tres copas en forma de flores de almendro con pimpollos y flores sobre una rama, tres sobre la otra, lo mismo para todas las seis ramas que se extienden del candelabro. Y sobre el candelero habrán cuatro copas en forma de flores de almendro con pimpollos y flores. Un pimpollo estará bajo el primer par de ramas que se extiende del candelabro, un segundo pimpollo bajo el segundo par, y un tercer pimpollo bajo el tercer par – seis ramas en total. Los pimpollos y ramas serán una misma pieza con el candelabro, labrados a martillo, de oro puro. Después harás las siete lámparas y las colocarás sobre el candelero para que iluminen el espacio frente a él”.
Los siete candelabros y tres uniones donde las ramas se juntan con la columna central representan las diez sefirót (cualidades divinas) del Árbol de la Vida de la Cabalá. La columna central corresponde al pilar central o equilibrium (sefirót 1, 6, 9 y 10) del árbol. Los candelabros a la izquierda corresponden al Pilar de la Severidad (sefirot 3, 5 y 8) y los de la derecha al Pilar de la Piedad (sefirot 2, 4 y 7).
Los nombres y números de las diez sefirót se presentan en el orden indicado debajo. El nombre más común para cada sefirá aparece primero, seguido de algunos nombres alternativos.
1. Kéter (Corona) o Kéter Elión (Corona suprema)
2. Jojmá (Sabiduría)
3. Biná (Entendimiento o inteligencia)
4. Jésed (Gracia o Bondad) o Gedulá (grandeza)
5. Gevurá (Valentía), Din (Juicio) o Pájad (temor)
6. Tiféret (Belleza) o Rajamím (Piedad,
Misericordia)
7. Nétzaj (Victoria, Constancia)
8. Hod (Gloria, Alteza)
9. Yesód (Cimiento) o Tzédek (Justicia)
10. Malcút (Reinado) o Shequiná (Proximidad
de Dios)
La menorá era el único recipiente del tabernáculo hecho de oro macizo (50 kgs. de oro, según Josefo). Los otros eran de madera bañada en oro. El oro puro de la menorá enfatiza aún más su simbolismo de luz divina. La luz de la menorá hacía al espacio sagrado. Este simbolismo de la luz se conserva en muchas sinagogas como el Ner Tamid, una luz que cuelga sobre el arca de la Torá y nunca se apaga. La luz fue el primer elemento de la Creación – el primer paso en transformar el caos en un orden cósmico. La luz da nacimiento tanto a la vida como a la Presencia de Dios. El salmo 104:2 describe a Dios como “envuelto en una túnica de luz”. La luz ha sido siempre asociada con la paz.
El filósofo judío y teólogo conocido como Filo de Alejandría o Philo Judaeus (15– 45 A.C.) relacionó a los siete planetas de la astrología clásica con las siete ramas de la menorá, con el sol en el centro. Las siete ramas pueden también considerarse como correspondiendo a los siete días de la Creación Bíblica.
La menorá fue adoptada como el emblema oficial del Estado de Israel en 1949, y está representada en la bandera presidencial. Existen otras formas de menorá, con diferente número de ramas, siendo la más común de ellas la de nueve ramas, relacionada con la festividad judía de Jánuca.
